10.04.2023

¿Qué es la alergia al polen?

Tiempo de lectura (minutos): 6

Contenido

  1. ¿Qué es la alergia al polen?
  2. ¿Cuáles son los síntomas de la alergia al polen?
  3. La fase temprana y tardía de la reacción alérgica
  4. ¿Cómo se desarrolla la alergia al polen?
  5. ¿Qué hace que tu sistema inmunitario reaccione con tanta sensibilidad?
  6. ¿Qué reduce el riesgo de padecer alergia al polen?
  7. 5 consejos prácticos para la alergia al polen
  8. Conclusión

¿Qué es la alergia al polen?

La alergia al polen también se conoce como rinitis alérgica estacional en el mundo médico. No se trata de un resfriado (lo que se llama rinitis infecciosa), sino de una forma de alergia. En este caso, se tiene una reacción alérgica a un determinado tipo de polen que circula por el aire.

Otra forma de llamar a la alergia al polen es "fiebre del heno". El polen lo produce la parte masculina de una planta cuando está en flor. Luego se libera en el aire en un intento de fertilizar a otras plantas de su especie. Esto ocurre con la ayuda del viento y los insectos.

Resumen: Cuando las plantas están en flor, liberan polen en el aire. La alergia al polen es una reacción alérgica a este polen.



¿Cuáles son los síntomas de la alergia al polen?

Algunas personas tienen una reacción alérgica al polen que hay en el aire. Esto provoca una respuesta inmune en la mucosa nasal. El cuerpo se defiende de las sustancias extrañas que penetran en el organismo. Los síntomas de esta "defensa" son:

  • Estornudos
  • Congestión nasal
  • Secreción nasal
  • Picor en la nariz y los ojos

La fase temprana y tardía de la reacción alérgica

La reacción alérgica se divide en una fase temprana y otra tardía.

La fase temprana

Comienza entre 5 y 15 minutos después de inhalar el polen. En esta etapa se produce una sustancia denominada histamina. La histamina es responsable de la secreción nasal, los estornudos y el picor.

La fase tardía

Entre cuatro y seis horas después de la primera reacción, comienza la fase tardía. En esta fase, se produce una inflamación general de la mucosa nasal, lo que provoca congestión nasal. Por eso la alergia al polen también puede afectarte por la noche [1]. Como sabes, no todo el mundo tiene alergia al polen. ¿Qué hace que a ti te gotee la nariz en la temporada de polen y a tus amigos no? ¿Quieres saber más sobre las alergias? Entonces te recomendamos que leas este artículo.

Resumen: Los síntomas directos de la alergia al polen son la secreción nasal, picazón en la nariz y estornudos. Entre 4 y 6 horas después, surgen otros síntomas, como la inflamación de la mucosa nasal, que provoca congestión nasal.

¿Cómo se desarrolla la alergia al polen?

Puede parecer que la alergia al polen es un problema local, debido a los síntomas localizados en la nariz y los ojos. Sin embargo, no es así. Es un problema inmunológico común que afecta a todo el cuerpo. Cuando se presenta, el sistema inmunitario no responde como debería. Reacciona con mayor sensibilidad de la necesaria.

¿Qué hace que tu sistema inmunitario reaccione con tanta sensibilidad?

Tener un sistema inmunitario más sensible depende de varios factores. Las siguientes 5 situaciones aumentan el riesgo de padecer alergia al polen:

  1. Una introducción temprana de alimentos o leche de fórmula.
    Es decir, ser alimentado con papilla o leche de fórmula a una temprana edad. Y, por lo tanto, no tomar leche materna, o sólo durante un breve período de tiempo. Se ha demostrado que la lactancia prolongada protege contra la alergia al polen. Es por eso que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que todos los niños sean amamantados durante al menos seis meses.
  2. Una fuerte exposición al humo de tabaco en el primer año de vida [2].
  3. Extirpación de las amígdalas.
    Los niños a los que se les han extirparon las amígdalas tienen más probabilidades de desarrollar alergia al polen [3].
  4. Una flora intestinal alterada. 
    Las personas que sufren de alergia al polen tienen una mayor cantidad de ciertas bacterias en el intestino (como Prevotella y Clostridium). Estas bacterias interactúan fuertemente con el sistema inmunitario. Debido a esa interacción, el sistema inmunitario puede generar una respuesta exagerada a sustancias como el polen [4].
  5. Experimentar estrés psicológico [5].
    El estrés exacerba los síntomas de alergia al polen. Esto se debe a que el estrés psicológico hace que el sistema inmunitario esté más alerta, lo que puede provocar una reacción exagerada al polen.

Resumen: La alergia al polen es un problema inmunológico común que afecta a todo el cuerpo. Las 5 situaciones anteriores aumentan el riesgo de desarrollar alergia al polen.

¿Qué reduce el riesgo de padecer alergia al polen?

Otros factores pueden tener un efecto protector contra la alergia al polen, como, por ejemplo:

  1. Una exposición temprana a las mascotas
    La exposición temprana a las mascotas hace que tu sistema inmunitario sea más tolerante a sustancias como el polen. Incluso existe el llamado "efecto granja", debido al cual los niños que viven en una granja durante sus primeros años de vida tienen hasta un 40 % menos de probabilidades de desarrollar alergias [6,7].
  2. Comer muchas frutas y verduras
    Las investigaciones muestran que una dieta rica en vitaminas, como las vitaminas E y C, ácidos grasos omega-3, antioxidantes y fibra protege contra la alergia al polen [8–10]. Comer mucho pan con margarina se asocia con un mayor riesgo de presentar alergia al polen [8].
  3. Tener hermanos mayores
    Si tienes hermanos o herm
    anas mayores, tu madre entra en contacto con más gérmenes durante el embarazo. Eso suele hacer que tu sistema inmunitario se vuelva más tolerante, incluso antes de nacer. Además, al tener hermanos entras en contacto con más gérmenes durante la infancia [11].

Resumen: La exposición temprana a las mascotas, comer muchas frutas y verduras, y tener hermanos mayores reducen el riesgo de desarrollar alergia al polen.

5 consejos prácticos para la alergia al polen

Por supuesto, la exposición temprana a las mascotas no puede realizarse a posteriori. Entonces, ¿qué puedes hacer para deshacerte de la alergia al polen? Aquí tienes cinco consejos prácticos que te pueden ayudar.

  1. Comprueba los niveles de polen
    Consulta el pronóstico de polen local e intenta permanecer en interiores cuando los niveles son altos.
  2. Dúchate y cámbiate de ropa cc Dúchate y cámbiate de ropa después de haber estar al aire libre para eliminar el polen de tu cuerpo o ropa.
  3. 3. Evita los productos perfumados
    Evita el uso de productos perfumados, como perfumes, velas y ambientadores, porque pueden irritar la nariz y causar alergias.
  4. 4. Come una dieta saludable
    Come una dieta saludable con muchas frutas y verduras, ya que estas contienen antioxidantes que pueden ayudar a reducir la inflamación.
  5. 5. Usa inhibidores naturales de la histamina
    Algunos ejempl
    os son el polen de abeja, los berros y la infusión de ortiga o rooibos.


Conclusión

La alergia al polen puede ser muy molesta y tener un gran impacto en nuestra vida. Por eso es importante entender de dónde viene y qué podemos hacer al respecto. Algunos factores de la infancia parecen desempeñar un papel significativo en su aparición, pero la dieta y el estilo de vida también influyen en los síntomas de la alergia al polen.

La alergia al polen puede tener una variedad de causas que afectan a todo el cuerpo. Si tienes síntomas de alergia al polen, hay bastantes opciones de tratamiento disponibles. Es una buena idea consultar con un terapeuta ortomolecular. Este puede identificar el origen de la alergia al polen y brindarte asesoramiento específico sobre posibles intervenciones.



Fuentes

  1. Akhouri S, House SA. Allergic Rhinitis. In: StatPearls [Internet]. Treasure Island (FL): StatPearls Publishing; 2022 [cited 2023 Feb 28]. Available from: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK538186/ 
  2. Skoner DP. Allergic rhinitis: definition, epidemiology, pathophysiology, detection, and diagnosis. J Allergy Clin Immunol. 2001 Jul;108(1 Suppl):S2-8. 
  3. Sultész M, Horváth A, Molnár D, Katona G, Mezei G, Hirschberg A, et al. Prevalence of allergic rhinitis, related comorbidities and risk factors in schoolchildren. Allergy Asthma Clin Immunol. 2020 Dec;16(1):98. 
  4. Zhu L, Xu F, Wan W, Yu B, Tang L, Yang Y, et al. Gut microbial characteristics of adult patients with allergy rhinitis. Microb Cell Fact. 2020 Sep 1;19:171. 
  5. D EHD, Mr A, Am F. Psychological stress and its relationship with persistent allergic rhinitis. European archives of oto-rhino-laryngology : official journal of the European Federation of Oto-Rhino-Laryngological Societies (EUFOS) : affiliated with the German Society for Oto-Rhino-Laryngology - Head and Neck Surgery [Internet]. 2016 Apr [cited 2023 Feb 28];273(4). Available from: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/25951791/ 
  6. Wise SK, Lin SY, Toskala E, Orlandi RR, Akdis CA, Alt JA, et al. International Consensus Statement on Allergy and Rhinology: Allergic Rhinitis. Int Forum Allergy Rhinol. 2018 Feb;8(2):108–352. 
  7. Strieker S, Weinmann T, Gerlich J, von Mutius E, Nowak D, Radon K, et al. Farm living and allergic rhinitis from childhood to young adulthood: Prospective results of the GABRIEL study. Journal of Allergy and Clinical Immunology. 2022 Nov;150(5):1209-1215.e2. 
  8. Farchi S, Forastiere F, Agabiti N, Corbo G, Pistelli R, Fortes C, et al. Dietary factors associated with wheezing and allergic rhinitis in children. European Respiratory Journal. 2003 Nov 1;22(5):772–80. 
  9. Roduit C, Frei R, Ferstl R, Loeliger S, Westermann P, Rhyner C, et al. High levels of butyrate and propionate in early life are associated with protection against atopy. Allergy. 2019 Apr;74(4):799–809. 
  10. Chatzi L, Apostolaki G, Bibakis I, Skypala I, Bibaki-Liakou V, Tzanakis N, et al. Protective effect of fruits, vegetables and the Mediterranean diet on asthma and allergies among children in Crete. Thorax. 2007 Aug 1;62(8):677–83. 
  11. Graham-Rowe D. Lifestyle: When allergies go west. Nature. 2011 Nov;479(7374):S2–4.